por 
Mientras seguimos esperando como agua de mayo una nueva entrada de Katatonia en el estudio para dar forma a un nuevo álbum, la banda sueca se preocupa de tenernos ocupados lanzando espaciadamente material con el que calmar la sed. Hablamos del Dethroned & Uncrowned, que era una reinvención de su Dead End Kings, hablamos de discos en directo y de su proyecto paralelo Bloodbath al que no hace mucho le dedicamos un artículo en esta página.
Ahora hablamos también de Sanctitude (Kscope, 2015), un nuevo DVD o Bluray en directo pero dándole una pequeña vuelta de tuerca a todo lo que nos habían ofrecido hasta ahora. En esta ocasión se trata de un unplugged con el sello personal de Katatonia. Todo comienza con la elección del escenario, ni más ni menos que en Union Chapel, una capilla gótica situada en Islington, Londres, y acostumbrada a albergar tanto eventos culturales como el que nos ocupa como a ser albergue de personas sin hogar de la capital británica. En definitiva un lugar de encuentro, de caridad y de oferta cultural. Un bello escenario que se acopla perfectamente con la música gótica y melancólica de Katatonia.
Bajo la luz de escasos focos y numerosas velas que conformaban un ambiente inolvidable, Katatonia ofreció un concierto que no era únicamente un unplugged, sino que también era una reinvención de sus canciones, muy al estilo de lo ya ofrecido en Dethroned & Uncrowned, añadiendo fuerza a las partes más atmosféricas y potenciando las partes más progresivas. La conjunción de música y escenario ofreció un resultado muy positivo, y por suerte los suecos tuvieron la feliz idea de grabar el evento para que ahora podamos disfrutarlo.
Tocando un repertorio bastante amplio, en el que se echan en falta algunas canciones por la lógica limitación del tiempo, frente al extenso catálogo de canciones inolvidables que tienen, podremos disfrutar de, entre otras, A Darkness Coming, Idle Blood, Lethean, The One You Are Looking For Is Not Here o Sleeper. Como digo, las posibilidades de elección eran muy amplias, pero creo que el setlist ha sido muy acertado.
No creo que nadie que ame Katatonia se pueda sentir defraudado, sobre todo los que se sumaron al carro, como es mi caso, una vez que abandonaron las voces guturales y los pasajes extremadamente opresivos. No sabemos cómo será el siguiente álbum de Anders Nyström y Jonas Renkse, alma mater de la banda, pero lo que está claro, viendo el nivel que ofrecen actualmente, es que será ofrecido con los brazos abiertos, sea cual sea el camino que tomen.
