Un verano azul, pero sin bicicletas en Calafell

Ya lo decía el título de la película de Jaime Chávarri, Las bicicletas son para el verano. Sin embargo, el Ayuntamiento de Calafell, provincia de Tarragona, ha decidido prohibir un año más que las bicicletas circulen por el paseo marítimo desde las 10 de la mañana a las 24h durante la temporada alta.

Pregúntenle a cualquier niño:

– ¿Qué es un verano sin bicicletas? 

– La mitad de un verano.

Si bien podría entenderse la prohibición en el área del paseo de Calafell Playa, pues entre las terrazas y el poyete que lo separa de la arena se hace estrecho, no se entiende la negativa de ampliarla al paseo que lo une con Segur de Calafell, de entre 10 y 15 metros de ancho.

Espacio suficiente para que todo el mundo transite libremente. Además, esta avenida sirve como conexión entre ambas poblaciones. No se usa sólo para el paseo de los veraneantes, sino también como camino de muchos trabajadores que prefieren utilizar el transporte ecológico de las bicicletas o los patinetes.

Se ha puesto como excusa para la prohibición los atropellos sufridos anteriormente. Por esta regla de tres deberían prohibirse los coches, ¿o no?

Lo cierto es que no hay voluntad política para solucionar según qué problemas. Podría habilitarse también una parte de la calzada, pero, claro, se perderían plazas de aparcamiento.

De modo que, un año más, los niños y adultos que deseen disfrutar, hacer deporte o usar un medio de transporte limpio, deberán hacerlo de noche.

Porque, en Calafell, las bicicletas son para la madrugada.

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