Underground – Suspense en el metro

PortadaAnthony Asquith, uno de los directores británicos más audaces de la época del cine mudo, dirigía Underground (Underground, 1928) producida por la British Instructional Films, ambientada en el metro londinense, un sitio perfecto para entrecruzar las vidas de los personajes. Un metro que no sólo da título a la película, sino que se muestra como un protagonista más en una secuencia inicial audaz, donde Asquith coloca la cámara en la parte delantera haciendo un travelling sobre la estación donde esperan los pasajeros. Estación, por cierto, que es la Lost Road Power del barrio de Chelsea.

No es la única escena destacable, ya que Underground destaca sobremanera por su montaje y su atrevimiento a la hora de seleccionar los planos, ofreciendo una variedad muy superior a la media de las producciones de cine silente. Cabría destacar la escena de la pelea en la sala de billar, donde una bola de marfil se lanza directamente contra la cámara, rompiendo un espejo. Los picados y contrapicados entre las sombras, añadiendo mayor tensión.

Pese a que inicialmente da la sensación de ser una película costumbrista, dedicada exclusivamente a enseñarnos la vida diaria de los londinenses y de sus viajes en metro, poco a poco va mutando. Inicialmente lo hace hacia el romance, pero poco a poco va tomando su forma definitiva mostrándose como una película de suspense, efectiva a la hora de transmitir tensión al espectador, con continuos vaivenes en las vidas de los protagonistas.

Nell, una atractiva joven, viaja como cada día en el metro, pero en esta ocasión llama la atención del electricista Bert, quien trata de cortejarla con escaso éxito. Mientras trata de eludir a Bert, es ayudada por Bill, trabajador del metro, quien zancadillea a Bert y tiene un breve encuentro con Nell. Un argumento suficiente para que surja un triángulo amoroso. Por un lado el apuesto y amable Bill, con nobles intenciones, y por otra lado Bert, presuntuoso y no acostumbrado a ser rechazado, de cólera fácil y mucho más impetuoso. La aparición de Kate, vecina y enamorada de Bert, completará el elenco de personajes.

Fotograma

A partir de aquí, se irá desarrollando toda la intriga y veremos los límites que son capaces de transgredir para lograr sus anhelos. Enredándose la trama hasta su brillante resolución final y su epílogo, de nuevo con una escena del metro memorable.

La película fue restaurada en 2009 por el British Film Institute, y en 2011 Neil Brand escribió una nueva partitura para acompañar la acción.