Han tenido que pasar nueve años para que Süma volviera a ofrecernos nuevos deleites discográficos. En su caso, su habilidad para encapsular las raíces de la emoción y mostrárnosla como un cuadro vivo, en continuo estado de movimiento. Precisamente, las canciones que integran “Noble Nature”(2018), su reciente álbum, han sido dibujadas a lo largo de todo este tiempo con diferentes pinceladas, a mayor gloria de un sonido tridimensional, más cercano a nigromantes de la abstracción plácida como Popol Vuh o Flying Saucer Attack que a cualquier tipo de etiqueta barata como post-folk.
No hay más que dejarse arrastrar por los tendones de estas diez invocaciones para darse cuenta de la fuerza tribal que arrecia a través de pequeños esqueletos percusivos de viveza animal, como queda patente en “Rudiments”. De dicho latido subterráneo se nutre el espacio perfilado para un cancionero imbuido por el espíritu de la naturaleza. De hecho, los sampleados de las grabaciones de campo de este disco proceden de una masía alejada de la gran urbe. Un lugar solitario desde el que el sonido del agua y las ranas no es un simple aderezo ornamental, sino parte integral de la composición en sí de las canciones.
De “Pass” a la titular del álbum, asistimos a un desfile de canciones nacidas desde la perdida, a propósito de la muerte de algunos familiares y amigos de Frank Rudow y Laura Clark mientras hacían el disco. De hecho, estas experiencias no sólo retrasaron la composición final del álbum, sino que también sirvieron para trazar un camino que comienza en el abismo para terminar en un progresivo viaje hacia la luz. Por eso mismo, no estamos ante un disco que se aferre a sus fantasmas para contagiar al oyente de desolación. Todo lo contrario, “Noble Nature” es una manifestación vital en toda regla. Canciones que buscan el sol desde las sombras del bosque, y que definen un imaginario de belleza absolutamente autónomo. Uno de esos discos que, a pesar de haber pasado muy desapercibido desde su publicación, ha sido cocinado en los fogones de lo atemporal. Medicina de boticario para todo el quiera ser transportado hacia un país de emociones a flor de piel, expuestas desde el recogimiento y la concepción del cuadro en plano fijo. Dicho de otro modo, como si Chris Marker filmara las canciones desde la duermevela de los sentimientos.
Por supuesto, la experiencia en vivo de “Noble Nature”es algo digno de ser visto. Los cuatro integrantes de Süma ofrecen actuaciones donde su música abre claros de libertad en su desarrollo. La prueba, en estas cuatro fechas de marzo:
08.03 Murcia (La Yeseria) + Tuya
09.03 Madrid (Fotomatón)
10.03 Zaragoza (C.C. Delicias) + Laura Gibson
23.03 Sant Feliu de Guixols (Nau Blau)