Hay cosas que no cambian, por mucha propaganda que se propague.
Barcelona fue, es y será siempre una ciudad cateta, como es el estado al que pertenece y del que es hermana gemela. Qué digo gemela, ¡siamesa!
Por mucho coffe to take away, kioscos de revistas de diseño o cafés encalados y estériles, acordes a las expresiones artísticas de hoy día. Por muchos barbudos o bigotudos.
Lo último son los nuevos vagones de metro, de blanco nuclear en su interior. Y nunca mejor dicho porque, cuando entras, es como si te estallase la de Hiroshima o Nagasaki en la retina. ¿Quién leches se ha encargado de la iluminación aquí? ¿Viene del pasado? ¿De los tiempos oscuros del medievo, acaso?
¿No sabe que en la actualidad las personas se pasan el día frente a una pantalla que brilla y brilla? ¿No sabe que a la gente le duelen los ojos? ¿Y que, de regreso a casa -porque los barceloneses no conocen la transición que es ir a tomarse unas copas después del trabajo, algo que podría atenuar la situación-, lo último que desean es más luz abrasiva directa hacia sus ojos? ¡Que es malo para la salud!
Si sólo fuera esto. Pero hay más. El pitido de cierre de puertas suena aún más fuerte que antes. ¡Y ya entonces pensábamos que eso no era posible! O sea, que además de ciego, te quedas sordo. ¿Por qué torturar así a los pasajeros? ¿Cuál es el motivo? ¿Será algún dentista frustrado que, al no poder ejercer taladrando muelas, ha visto aquí una oportunidad para liberar sus instintos más oscuros? ¡Que además, los sonotones ni las lentes los cubre la seguridad social!
Solución: Bajarte el antifaz, sacar el bastón de invidente y ponerte los tapones para los oídos, al entrar.
Jo, así te pierdes todas las estampas y las conversaciones ajenas.
Ya.
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Ah, también han renovado la señalización del recorrido de la línea en los vagones. Antes, las paradas se iban iluminando por una lucecita roja, según se alcanzaban. Ahora, es una pantalla blanca blanca, sin más, porque a cada dos por tres se estropea y no muestra ninguna información. ¿En serio? ¿Y todavía nos queréis hacer creer que esto es Europa?